¿EL LIBRO DE GÉNESIS FUE ESCRITO PRODUCTO DE UN PLAGIO DE MITOS SUMERIOS, BABILÓNICOS Y/O EGIPCIOS?: RELATOS COSMOGÓNICOS PARTE II: LOS RELATOS EGIPCIOS DE LA CREACIÓN

¡Dios les bendiga!

El pambabilonialismo se caracterizó por afirmar la idea de que todos los plagios encontrados en el texto bíblico de génesis 1 en adelante se debían a que el autor, o los autores, copiaron de textos sumerios y babilónicos. Esta idea colapsó porque una generación posterior de asiriólogos destruyó los supuestos ejemplos de plagios. Además de eso, se encontró que otros textos recién descubiertos como los encontrados en Ugarit, apoyaban más la idea de plagio a los textos cananeos que a los anteriores.

La influencia egipcia al texto bíblico para establecer un caso de plagio es “más fuerte” en la literatura de sabiduría, no en la cosmogónica. No obstante, es común escuchar casos de la creación donde se apele a textos egipcios como la base en donde los hebreos copiaron sus ideas. Por esta razón expondré lo que sabemos hoy sobre la teología egipcia y su cosmogonía.

En Egipto no existe una historia de la creación

Al igual que en Sumeria, no existe un texto estándar sobre la creación. No hay un génesis, hay varios. Pero, el problema aun es mayor en Egipto, pues no solo no hay un texto cosmogónico estándar, es que los mismos son tan raros que casi no aparecen.

Antonio Loprieno nos dice en su página 363 (Loprieno, 1996):

“Los mitos son fundamentales en la literatura narrativa de civilizaciones como la antigua Mesopotamia y Grecia. De Egipto, sin embargo, se conservan pocas narrativas míticas. Esta escasez ha ocasionado mucha discusión… Entre las narrativas míticas sobrevivientes, unas pocas están en inscripciones de templos, en particular el Mito de Horus en el templo de Ptolemaico (el período de Ptolemaic0 es del 323-30 AC – demasiado lejos de un génesis que si aceptamos la hipótesis JEPD, el capítulo 1 pertenece a J, el cual es del 900 A. C., aquí tendríamos un caso a favor de un plagio de los egipcios a los textos hebreos)”… (Paréntesis mío).

Claude Traunecker nos dice en la página 70 (Traunecker, 2001):

“Mientras que las alusiones a la creación son frecuentes en los textos de cada período, los relatos mitológicos [de la creación], incluso los parciales, son raros”

Más llamativo aun es el hecho de que en Egipto tampoco se nos dice como se creó la humanidad. Clifford nos dice en la página 115 (Clifford, 1994):

“Con respecto al lugar de la comunidad humana en la creación, los textos egipcios se distinguen tanto de la Biblia como de la literatura mesopotámica. ‘La existencia de los hombres al lado de los dioses en el momento de su estancia en la tierra se asume en todas partes, pero hasta ahora no se conoce la explicación detallada de la creación del hombre”.

Además de esto, en su página 99 Clifford nos dice (Clifford, 1994) :

“Al igual que las cosmogonías de las culturas vecinas, no hay un relato  estándar a la que otras versiones debían ajustarse”.

Clifford resume toda la cosmogonía egipcia en sus páginas 101 – 107 diciéndonos que (Clifford, 1994) :

Antes de la creación según los textos egipcios, existía un caos primordial, una nada caótica (que era algo y no nada) de donde provinieron los dioses. Esta era conocida como Nuu, aunque actualmente la conocemos como Nun.

Existen 3 tipos de creación diferente según la teología dada. Uno de ellos era a través del proceso de masturbación del creador para generar a la pareja Shu y Tefnut. Otro de ellos era a través del acto creativo de Ptah (muy parecido al Dios bíblico. Paréntesis mío). Y el último era semejante a la actividad de un artesano.

Los 3 modelos de creación egipcia

Cada modelo corresponde a una teología, y tienden a variar. Los modelos son:

  1. La Heliopolitana

Un resumen exacto y sencillo de esta teología viene de (Cronicas de Kemet, 2015):

La teología Heliopolitana, se basa en la creencia en la Enéada, es decir, nueve dioses principales origen de todas las cosas. Es la primera vez que el mito de Osiris, como rey legítimo de todo Egipto, forma parte de una creencia demiurga.

El primero de estos dioses es Atum-Ra, divinidad solar conocido como “El que existe por sí mismo“, ya que era hermafrodita y se creó a sí mismo. Surgió en medio del Nun o aguas primigenias, concretamente en una colina surgida en medio de ellas y allí crea mediante masturbación, saliva, lágrimas o sudoración, según la versión del mito, a Shu y Tefnut. Ellos son dioses del aire y la humedad respectivamente, así como los dioses que engendraron a Geb, la tierra y Nut, la bóveda celeste.

De ellos nacerán Osiris dios de inframundo, Isis la gran maga y trono de Egipto, Seth dios del caos y la guerra y Neftis paralela pero antítesis de Isis, que se la relacionaba con los ritos funerarios.

En esta tradición no hay nada parecido en lo más mínimo a génesis 1. Walton nos dice en su página 32 (Walton, 1989):

“Por lo tanto, no hay un material específico utilizado para la creación del cosmos en la forma de pensar egipcia, pero tampoco es creación de la nada. Toda la materia (existente en forma caótica) se convierte en parte del dios creador, que luego crea, dibujando de sí mismo…”

  1. La Hermopolitana

En la teología Hermopolitana, los creadores fueron la Ogdóada. Se trata de cuatro parejas de genios, los Henu, representados como ranas los masculinos y serpientes los femeninos (o figuras antropomorfas con la cabeza de estos animales).

Ellos crearon el huevo o loto divino, del cual nacería el dios solar, identificado con Atum-Ra (iniciando el relato de la teología heliopolitana). Su dios principal seráThot, quien sin embargo no interviene en la creación y fue una divinidad lunar, como contrapunto (equilibrio) a la creación de los Henu.

En esta tradición tampoco hay nada semejante a génesis 1.

  1. La Menfita

Para la teología Menfita, la divinidad principal es Ptah-Ta-Tenen. Se la considera una creencia más intelectual que natural.

En ella Ptah es la colina primordial, de la que surgen todos los dioses, siendo Atum-Ra solo una de sus formas. La diferencia primordial es que él crea el mundo a través del corazón, donde residía el pensamiento y donde concebiría a todos los demás seres; y de la lengua, el órgano del verbo creador.

La politización de esta creencia se debe a la identificación del rey con Osiris y Horus, según el momento corregente/gobernante.

Esta es la única tradición que aparentemente presenta un elemento común con génesis 1: la creación por la palabra de Dios.

El texto que nos enseña acerca de la teología Menfita y de donde obtenemos información sobre todo esto viene de la piedra de Shabako. Usted puede encontrar información de ella en el museo británico. Una copia del texto que veremos aquí la obtuve de egiptología.org. El texto nos dice (Lopez, 2003):

Línea 1

El Horus viviente, que hace propicias Las Dos Tierras, Las Dos Señoras, que hace prosperar Las Dos Tierras, el Horus de Oro, el que hace prósperas las Dos Tierras; el Rey del Alto y Bajo Egipto: Neferkara, Hijo de Ra, Shabako, bienamado de Ptah ‘Sur de su Muro’, que viva como Ra por siempre.

Línea 2:

Su Majestad copió este texto nuevamente en la casa de su padre Ptah [el que está en el] ‘Sur de su Muro’. Lo encontró [Su Majestad] como una obra realizada por sus ancestros, que había sido destruida por los gusanos, de manera que no podía ser reconocido en su totalidad. Por eso Su Majestad lo copió de nuevo, para que esté en mejor estado de lo que estaba anteriormente. [Lo hizo] para que su nombre perdure y para que se haga su monumento en la Casa de su Padre Ptah ‘Sur de su Muro’ por toda la eternidad (Dt), como obra hecha por el Hijo de Ra [Shabako] para su padre Ptah-Ta-tenen, para que pueda ser dotado de vida por siempre.

Columnas:

(3) — [Rey del Alto y Bajo Egipto] es este Ptah, que es llamado por el gran nombre: [Ta-te]nen [Sur de su Muro, Señor de la Eternidad] — 

(4) — [el unificador] del Alto y Bajo Egipto es él, este unificador que se alzó como Rey del Alto Egipto y se elevó como Rey del Bajo Egipto. 

(5) Perdida (

6) —‘autocreado’, así dice Atum: ‘quien creó a los Nueve Dioses’.

(7) [Geb, señor de los dioses, ordenó] que los Nueve Dioses se reunieran con él. Juzgó a Horus y Seth 

(8) y puso fin a su disputa. Hizo a Seth rey del Alto Egipto en la tierra del Alto Egipto, el lugar en el que había nacido, que es Su, y Geb hizo rey del Bajo Egipto a Horus, en la tierra del Bajo Egipto, el lugar en el que su padre fue ahogado,

(9) que es ‘La división de la Dos Tierras.’ Así Horus permaneció sobre una región y Seth sobre la otra y mantuvieron la paz sobre las Dos Tierras en Ayan, que es la frontera de las Dos Tierras.

(10a) Dicho por Geb a Seth: ‘Dirígete al lugar en el que naciste’ 

(10b) Seth: Alto Egipto. 

(11a) Dicho por Geb a Horus: ‘Acude al lugar en el que tu padre fue ahogado’.

(11b) Horus: Bajo Egipto. 

(12a) Palabras de Geb a Horus y Seth: ‘Os he separado’ 

(12b) — Bajo y Alto Egipto.

(12c) Entonces Geb creyó injusto que la parte correspondiente a Horus fuese igual que la de Seth, y por eso le concedió [toda] su herencia, porque Horus es el hijo de su primogénito.

(13a) Palabras de Geb a los Nueve Dioses: ‘He nombrado 

(13b) a Horus, el primogénito’

(14a) Palabras de Geb a los Nueve Dioses: ‘El Único, 

(14b) Horus la sucesión. 

(15a) Palabras de Geb a los Nueve Dioses: ‘A este heredero, 

(15b)Horus, mi herencia’ 

(16a) Palabras de Geb a los Nueve Dioses: ‘Al hijo de mi hijo, 

(16b) Horus, el chacal del Alto Egipto —. 

(17a) Palabras de Geb a los Nueve Dioses: ‘El primogénito, 

(17b) Horus, el ‘Abridor de Caminos.’ 

(18a) Palabras de Geb a los Nueve Dioses:’ El hijo que nació — 

(18b) Horus, en el día del nacimiento del Abridor de caminos’

(13c) Entonces Horus se quedó en la región. Es el unificador de esta tierra, proclamado con el gran nombre de Ta-tenen, [que está al] ‘Sur de su Muro’, Señor de la Eternidad y así surgieron 

(14c) las Dos Grandes Magas sobre su cabeza. Él es Horus que se erigió como rey del Alto y Bajo Egipto, quien unió las Dos Tierras en el nomo del Muro, [blanco] el lugar en el que se unen las Dos Tierras.

(15c) Se colocaron el junco y el papiro en la doble puerta de la Casa de Ptah, y Horus y Seth se pacificaron y unieron. Fraternizaron de forma que pudieron cesar sus disputas 

(16c) en cualquier lugar en el que pudieran existir, siendo unidos en la Casa de Ptah, La ‘Balanza de las Dos Tierras’ en la que el Alto y Bajo Egipto se pesaron.

Esta es la tierra 

(17c) — el sepelio de Osiris en la Casa de Sokar. 

(18c) — Isis y Neftis sin demora, 

(19) porque Osiris fue ahogado en sus aguas. Isis [y Neftis] buscaron, [le vieron y atendieron]. 

(20a) Horus habló a Isis y Neftis: ‘Deprisa, cogedle —

‘(21a) Isis y Neftis hablaron a Osiris: ‘Venimos, te tomamos —.’

(20b) — y le llevaron a 

(21b) la tierra. [Él accedió a los portales oscuros en la gloria de los señores de la eternidad]. — [Así Osiris heredó] la Tierra 

(22) en la fortaleza real, al norte de [la región a la que él había venido, y su hijo Horus se erigió como rey del Alto y Bajo Egipto, en el abrazo de su padre Osiris y de los dioses que están delante y detrás de él].

(23) Se construyó la fortaleza real [bajo el mandato de Geb —]. 

(24a) Geb habló a Thot: …… 

(25b-26b) [Geb] habló a Isis: … 

(27b) Isis hizo venir a [Horus y Seth]. 

(28b) Isis habló a Horus y Seth: ‘[Venid]…

‘(29b) Isis habló a Horus y Seth: ‘Mantened la paz…..’ 

(30b) Isis habló a Horus y Seth: ‘La vida será placentera para vosotros cuando…

(31b) Isis habló a Horus y Seth: ‘Él es quien seca vuestras lágrimas… ‘

(48) Los dioses que vinieron a la existencia de Ptah.

(49a) Ptah que está sobre el Gran Trono,… quien creó a los dioses

(50a) Ptah-Nun, el padre que [engendró] a Atum.

(51a) Ptah-Naunet, la madre que dio a luz a Atum.

(52a) Ptah el Grande que es el corazón y la lengua de la Enéada.

(49b) Ptah… de quien nacieron los dioses

(50b) [Ptah]… de quien nacieron los dioses

(51b) [Ptah]…

(52b) [Ptah]… Nefertum en la nariz de Ra, todos los días.

(53) Allí tomó forma, en el corazón [de Ptah], y allí vino a la existencia, en la lengua [de Ptah], algo en la forma de Atum, porque Ptah es el Grande que infundió la vida a todos los dioses y a sus kas por medio del corazón en el que Horus tomó forma y por medio de la lengua en la que Thot tomó forma,…

 (54) como [una manifestación de Ptah].

Así sucedió que el corazón y la lengua obtuvieron la supremacía sobre [todos] los miembros [del cuerpo] de acuerdo a la doctrina que él está en cada uno de los cuerpos y cada una de las bocas de cada uno de los dioses, de todos los hombres, de todo el ganado, de todos los seres que reptan y de todo lo que vive, pensando lo que desea y decretando todo aquello que anhela.

(55) Su Enéada está ante él como dientes y labios. [Ellos son] el semen y las manos de Atum, porque la Enéada de Atum vino a la existencia por medio de su semen y sus dedos. La Enéada es, en verdad, los dientes y los labios en esa boca que pronunció el nombre de todas las cosas, de la que Shu y Tefnut surgieron, 

(56) y la que hizo nacer a la Enéada.

La vista de los ojos, la audición de los oídos, la respiración de la nariz, informan al corazón que es el que hace que todo conocimiento pueda manifestarse, y es la lengua la que pronuncia aquello que el corazón concibe. Así fue como nacieron todos los dioses y su Enéada se completó, porque cada palabra del dios vino a la existencia por medio de lo que el corazón pensaba y la lengua ordenaba.

(57) Así fue creado cada uno de los kas, y establecidos todos los hemsut, aquellos que procuran todos los alimentos y provisiones, por medio de esta palabra. [Así también se hace justicia] a quien hace lo que es deseado [y se castiga a] quien hace lo no deseado. Así se da la vida a quien tiene paz y la muerte a aquel que tiene pecado. De esta forma se crearon todos los trabajos y todas las artes, la acción de las manos y el andar de las piernas, 

(58) así como el movimiento de cada uno de los miembros, de acuerdo a la orden concebida por el corazón y manifestada por medio de la lengua, y que produce todas las cosas.

Y de esta manera se dice de Ptah: ‘El que creó todo y dio la existencia a los dioses’. En verdad él es Ta-tenen, quien hizo nacer a los dioses y del que surgió toda existencia: la comida, las provisiones, las ofrendas divinas, y todas las cosas buenas y hermosas. Así se reconoció y comprendió que su poder es superior al de cualquier otro dios y de esta forma Ptah se sintió satisfecho después de crear todas estas existencias y cada una de las divinas palabras.

Él hizo nacer a los dioses [de las ciudades], fundó las ciudades y los nomos, colocó a los dioses en sus 

(60) santuarios, estableció sus ofrendas, dio origen a sus capillas, y creó sus cuerpos de la forma en que sus corazones los desearon. Y así fue como los dioses entraron en sus cuerpos, (en la forma) de todas las maderas, de todas las piedras, de todo el barro, y de todas las cosas que crecen sobre él 

(61) y en las que residen sus manifestaciones.

De esta manera todos los dioses fueron reunidos en él, y también sus kas, satisfechos y unidos al Señor de las Dos Tierras.

El granerode Ta-tenen es el Gran Trono que alegra el corazón de los dioses [que están] en la Casa de Ptah, la señora de todo lo vivo, por medio de la que se provee el sustento de las Dos Tierras, 

(62) debido a que Osiris estaba flotando en sus aguas. Isis y Neftis lo advirtieron, lo encontraron y se consternaron, pero Horus ordenó a Isis y Neftis que tomaran el cuerpo de Osiris y evitasen que se hundiese. 

(63) Ellas volvieron sus cabezas a tiempo y le llevaron a la orilla. Así fue como él accedió a las Puertas Ocultas, en la gloria de los Señores de la Eternidad, en los pasos de Aquel que brilla en el Horizonte, sobre los caminos de Ra, en el Gran Trono. 

(64) Él accedió a La Gran Casa y se reunió con los dioses de Ta-tenen, Ptah, el señor de los Años.

Así Osiris entró en la tierra en la Fortaleza Real, al norte de la tierra a la que había llegado. Su hijo Horus se alzó como rey del Alto Egipto y como rey del Bajo Egipto, en el abrazo de su padre Osiris y de los dioses que se encontraban delante y detrás de él.

Desde la columna 53 hasta la 61 se encuentra la información que nos ayudará en nuestro caso de estudio. De entrada, es bueno decir que este texto es fechado 2 siglos después de Salomón. Si este texto influyó en génesis 1 y fue de donde los hebreos copiaron la idea de una deidad creando por su palabra, para esta fecha no era posible, pues la dinastía 25 en Egipto o Kushita, es del 747 a 664 a. C., originaria de la ciudad-estado de Napata (Kush); y si aceptamos la postura más liberal en cuanto a la fecha de génesis (JEPD) al ser un texto del redactor J, su composición es del 900 a. C. Es imposible hablar de plagio aquí. Aunque sí, hablamos de plagio por parte de los egipcios a los textos hebreos.

Respecto a esto, Lichtheim nos dice en su página 5 (Lichtheim, 1973, 1976, 1980):

“Otro ejemplo más del deseo de usar el prestigio del pasado en beneficio del presente es la llamada Teología Menfita, inscrita en la Piedra Shabako. En este trabajo, el Rey Shabako de la Dinastía Veinticinco alega tener una copia de una obra temprana que había encontrado en la condición de estar comida de gusano. El reclamo, junto con el lenguaje fuertemente arcaizante del texto, engañó a generaciones de egiptólogos para que asignaran la composición al Reino Antiguo. Un artículo reciente de F. Junge (MDIK, 29 [1973], 195-204) da la certeza de que es un trabajo de la Dinastía Veinticinco”.

Con esto es más que suficiente para decir que fueron los egipcios quienes probablemente copiaron de los hebreos (claro, si adopto la creencia pop sobre este tema), y no lo contrario.

Un punto aún más sobresaliente en el caso es que Ptah ni siquiera es un dios, y su hablar creativo es una metáfora. Traunecker, en su página 79 nos dice (Traunecker, 2001):

“Sin embargo, la investigación reciente ha demostrado que Ptah y “corazón y lengua” no son personajes divinos, sino términos filosóficos que designan el proceso creativo intelectual. Ptah es el nombre de la herramienta empleada por el dios creador. Por lo tanto, según la teología Menfita, al principio de la creación, el » principio de Ptah» (corazón y lengua) era preexistente”.

Como si todo esto no fuera poco, tenemos el elemento más significativo de todos, y es que Ptah en realidad no habla, sino que usa a la enéada como sus dientes y boca. Benjamin nos dice esto en su página 33 (Benjamin, 1991):

“La Enéada de Ptah sirve como sus dientes y labios. Son el semen y las manos de Atum que nacieron mientras se masturbaba. La Enéada son los dientes y los labios que pronunciaron los nombres de todas las cosas…”

Aquí no hay ningún acto de habla al estilo de Dios en génesis 1, lo que hay es una metáfora para decirnos que se habla a través de la enéada, la que consiste de dioses. Es decir: Ptah usa a los dioses para crear las cosas, pero no existe un “y dijo Ptah”, y se creó, al estilo de génesis 1. Esto nos deja bastante claro con la realidad de que no hay un solo texto en Egipto de donde los hebreos pudieron plagiar génesis 1.

Conclusión

Visto ya que tan solo encontrar textos egipcios cosmogónicos es difícil, los que parecen hacer alusión a la creación, no tienen nada que ver con génesis 1. No hay forma de establecer plagios o prestamos aquí. Pero si aun así alguien sugiere que los hay debido a que “Ptah crea de una forma similar que Dios en génesis 1 con su habla”, entonces (recordando los pasos metodológicos para establecer plagios) debe explicar cómo culturas mágicas y chamanicas poseen alusiones similares sobre crear con “voz”. Tiene que establecer la conexión histórica o explicar este fenómeno.

Bibliografía

Benjamin, M. a. (1991). Old Testament Parallels. Paulist.

Clifford, R. J. (1994). Creation Accounts in the Ancient New East and in the Bible. Catholic Biblical Quarterly Monograph Series.

Cronicas de Kemet. (1 de septiembre de 2015). La mirada de Horus. Recuperado el 9 de junio de 2019, de La mirada de Horus: https://www.lamiradadehorus.com/cosmogonia-heliopolitana/

Lichtheim, M. (1973, 1976, 1980). Ancient Egyptian Literature (3 vols). Universidad de California.

Lopez, F. (enero de 2003). La tierra de los faraores. Recuperado el 9 de junio de 2019, de La tierra de los faraores: http://egiptologia.org/?p=444

Loprieno, A. (1996). Ancient Egyptian Literature: History and Forms. Brill.

Traunecker, C. (2001). The Gods of Egypt. Cornell.

Walton, J. H. (1989). Ancient Israelite Literature in its Cultural Context. Zondervan.